A 47 metros – Crítica de Cine

Opinión personal:

Ésta, es una película que yo vi hace dos años en el cine. La verdad que, las películas relacionadas con los tiburones son mis favoritas, porque todo lo que tenga que ver con ellos me fascina, por lo que, todas las disfruto muchísimo.

Esta película, fue estrenada en 2017 y recaudó más de 61 millones de dólares en taquilla.

Tenemos a dos hermanas que se van de vacaciones a México. Kate y Lisa.

Kate es una chica atrevida que siempre está arriesgándose a hacer cosas que le provocan un gran subidón de adrenalina, sin embargo, Lisa acaba de ser abandonada por su pareja porque era ‘aburrida’.

Cuando Kate intenta convencer a Lisa de que se bañen en una jaula en el océano rodeada de tiburones, ésta no tarda en negarse rotundamente, pero claro, después de su ruptura, Lisa necesita demostrarse a si misma que no es un muermo y decide ser valiente y adentrarse en las profundidades del océano.

Cuando están dentro de la jaula, lo que nuestras protagonizas no pueden ni imaginar es que, la cuerda va a romperse, y la jaula va a caer al fondo del océano, más concretamente, a 47 metros de profundidad.

La situación es muy complicada, y prácticamente saben que van a morir, pues se encuentran en el fondo del océano, rodeadas de tiburones, con unas bombonas de oxígeno que no les darán para mucho tiempo y la oscuridad del océano rodeándolas.

Todo esto, sin mencionar que están acechadas por tiburones, unas criaturas despiadadas que buscan alimentarse de sus víctimas.

Ahora, ambas tienen que ser valientes y pelear por salir vivas de esta terrible pesadilla. Nuestras dos protagonistas, van a intentar buscar una solución a contrarreloj, pero claro, la cantidad de oxígeno que están recibiendo y la profundidad van a nublar su mente, provocándoles alucinaciones.

La verdad que, ésta, es una película que me ha parecido muy realista, tanto por la interpretación de sus personajes, como por los tiburones y los diferentes tipos de vida que nos encontramos en el océano.

Lo único que quizá me haya dejado un mal sabor de boca es que, el escenario principal es el fondo del océano, por lo que la iluminación es escasa. A parte, al estar encerradas y no salir de la jaula (excepto en ciertas ocasiones) es un tanto repetitivo el hecho de estar encerradas y no poder hacer nada, no es como en otras películas en las que, se encuentran en la superficie del mar y pueden encontrar otros medios en los que apoyarse para salvar su vida.

La actuación de las protagonistas es totalmente creíble, la verdad que, a Kate ya la conocía de una serie también relacionada con el agua (H2O), por lo que, me ha sorprendido la gran evolución que he visto profesionalmente en su carrera como actriz.

Esta, es una película que se centra principalmente en Lisa y Kate, por lo que, tenemos algunos personajes secundarios, que son básicamente los dueños del negocio de la jaula con los tiburones, pero no son muy recurridos, puesto que, la mayoría de las veces que sabemos algo de ellos es porque nuestras protagonistas se están comunicando con ellos a través de un walkie.

La jaula en la que están metidas Kate y Lisa es muy real, además fue creada especialmente para la película y he de decir que, ambas, tuvieron que aprender a bucear para la misma, lo que me parece muy profesional por parte de las actrices, debido a que, muchas personas tienen fobia al agua y les resulta muy difícil aprender las diferentes técnicas de buceo.

A pesar de ser clasificada como una película de terror, a mí no me ha dado ningún miedo, por lo que, os animo a verla porque vais a disfrutarla muchísimo.

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