La luz de mis ojos, de Verónica Valenzuela – Reseña

Opinión personal de la novela

Hoy os traigo la Reseña de “La luz de mis ojos”, un libro escrito por Verónica Valenzuela, y publicado por la editorial Kiwi.

En este libro conoceremos la historia de Mario.

Mario Toledo es un enfermero que trabaja en la UCI junto con Nora, su mejor amiga y compañera. Hasta que un día, ve en un tablón de anuncios del hospital que se necesitan voluntarios para ayudar en Somalia, y sin dudarlo, Mario decide irse para vivir una tremenda aventura.

Lucía buscó en la agenda que tenía en su escritorio las fechas concretadas para junio, cuando tendrían que estar listos los preparativos de la salida hacia Somalia. Cuando me miró con el bolígrafo entre sus labios, supe que era yo quien había ganado la partida.

Cuando llega allí, todo lo que ve le desconsuela, pues, si al trabajar en la UCI ya se encontraba en situaciones complicadas que le hacían llorar, el estado de las personas que tenía que atender allí era devastador, tanto que, muchas de ellas morían sin remedio.

Su llegada a  Somalia, es un soplo de aire fresco para los habitantes de allí porque, a diferencias de otras de las personas que allí se encuentran no se da por vencido, y lucha hasta el final por cada uno de sus pacientes. Además, se lleva un maletín de España cargado de antibióticos y medicamentos que ayudan a salvarle la vida a muchas de aquellas personas.

Pero un día, se encuentra con una muchacha tirada en medio del camino, y la lleva corriendo pues cree que se va a morir, pero lo que tiene es una apendicitis y tras ser operada se recupera y se queda con ellos para ayudarles en todo lo necesario.

Hasta que, un terrible accidente hace que tenga que regresar a España junto con una persona muy importante para él, con la que, llegará a casarse.

Pero cuando su relación se ve más consolidada y deciden tener una niña, todo cambia, pues su esposa no sabe comportarse, no quiere ver a la niña ni tampoco darle de comer. Es cierto que, esta mujer, al vivir en Somalia ha tenido unas condiciones de vida muy difíciles y ha sufrido mucho en su infancia, pero, por supuesto, Mario no quiere que le trasmita todos esos miedos a su hija, por lo que, se desvive por ella poniendo su vida en ello y compaginando el trabajo con su cuidado.

Hasta que, un día, su esposa entra en razón y vuelve a comportarse de una manera normal, tanto con la niña como con él, y decide cuidar de nuevo de ellos y volver a ser la mujer de la que Mario se enamoró.

Pero… claro, no todo es del color de rosas, porque, llega un momento en el que, estas dos personas tienen que separarse y la vida de Mario va a caer en picado por completo.

Lo único que le importa en su vida es Luz, su hija, una pequeña adorable que quiere a su padre más que a ella misma, y que se encontrará en el centro de una situación horrible, pues Mario tiene que bajar al mismísimo infierno para intentar ver a Luz a toda costa, y no duda ni un segundo en hacer todo lo necesario, por verla, aunque sea diez minutitos.

¿Conseguirá Mario recuperar a su pequeña?

Me volví a la madre de la niña y le pedí con un gesto que me dejara cogerla. La mujer se mostró temerosa, pero mi sonrisa junto a las palabras tranquilizadores que Palo le dirigió, acabaron por convencerla.
Sentándome con el bebé en el borde del colchón, rocé su boquita con el dedo. La criatura comenzó a succionarlo con hambre y al retirarlo volvió a llorar de nuevo, así que aproveché el berrinche para depositar una minúscula porción de arroz entre sus labios.

Bueno, pues ahora que ya os he contado un poquito de lo que va el libro, os contaré lo que a mí me ha parecido.

Comienzo por la edición, que es de tapa blanda con solapas. En la portada podemos ver a nuestra querida Luz abrazada a su padre y con una carita de felicidad absoluta.

El libro está narrado en primera persona por Mario, algo que me ha parecido completamente acertado, debido a que, es su historia la que nos está contando, y de esta manera, he podido conocer por todo el sufrimiento que ha pasado y todas las cosas que ha tenido que pasar y arriesgar por volver con su pequeña.

La lectura es rápida y sencilla, es el primer libro que leo de la autora y la verdad que me ha impresionado.

La pluma de Verónica es conmovedora, y apasionante, ha conseguido adentrarme completamente en la historia, y no solo eso, sino que, me ha hecho sentir en primera persona el dolor que siente nuestro protagonista tras la pérdida de Luz.

Los personajes son maravillosos, personalmente, he quedado completamente enamorada de Mario, pues es un hombre diez, es paciente, bueno, valiente, y se sacrifica por aquellas personas por las que ama, cuanto más conocía de él, más conquistaba mi corazón.

A diferencia de él, su mujer es una chica despiadada, descarada y sin corazón alguno.

La pequeña luz es una bendición, es tan bonita y tan buena que eso la hace ser especial. Además de ser una niña muy lista es cariñosa y su inocencia es tan infinita que se merece lo mejor del mundo, y en este caso, es estar al lado de su padre.

La trama de libro es maravillosa, tengo que reconocer que he sufrido mucho por Mario por la situación que tiene que vivir, pero también es verdad que esta situación se da hoy en día en muchas ocasiones. Una denuncia falsa, la pérdida de un hijo, todos los bienes materiales…

Es cierto que, en muchas ocasiones, en un divorcio, los hombres terminan siendo bastante desfavorecidos y perdiendo a sus hijos, muchas veces de una manera injusta, porque como en todo, un niño necesita tanto a su madre como a su padre, pero como cada caso es diferente, siempre habrá una parte que se implica más o que esté dispuesta a dar más, y no tiene porque ser siempre la madre.

Con las maletas guardadas en el coche, la llevé a almorzar a uno de sus restaurantes de comida rápida favoritos.
Sentada ante una hamburguesa de queso le mostré los billetes, dándome cuenta de que había dejado olvidado sobre el sofá el de Siara, así que llamé a la agencia para que anularan su plaza en el avión. ¡Qué más daba! Esperaba que le saliera una úlcera de estómago sabiendo que íbamos a estar en la ciudad con la que llevaba soñando toda su vida.

Otra de las partes de este libro que he considerado maravillosa es la gran labor que hace Mario en Somalia, ya que, hoy en día es otra realidad que, por tenerla lejos, pasa “desapercibida”, pero me he sentido tan dolida con la gran cantidad de cosas conocidas en esta historia que os prometo que se me ha encogido el alma.

El final no podía ser de otra manera, llevaba todo el libro esperando a que sucediese, y, aunque podría no haber sido de esa forma, me he sentido muy satisfecha con lo ocurrido para cerrar esta historia.

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