Crítica de cine: One Day

Opinión personal

Después de mucho tiempo viendo la caratula del blu-ray en la Fnac, y después de oír hablar maravillas de esta película, no he podido hacer otra cosa que verla, y solo puedo decir que me arrepiento de no haberlo hecho antes. One Day es una de esas películas que verías de nuevo inmediatamente después de que hayan terminado los créditos.

One Day nos ofrece una historia de amistad, una amistad de estas raras entre un chico y una chica que temen decir te quiero. Y esta historia nos llega a través de momentos que suceden en el mismo día, el 15 de julio. Durante veinte años vamos a conocer la historia de estos dos jóvenes, Emma y Dexter, y sobre todo su relación, que sufre cambios y trasformaciones.

Esta historia, como premisa, he de reconocer que es bastante simple y puede parecer incluso la típica historia romántica de dos chicos que se enamoran, pero nada de eso. Me he visto sorprendida al ver el detallismo que tiene este trabajo audiovisual. Cada pieza del puzle encaja perfectamente.

El guión trata de por sí un tema que ha sido muy tratado en el cine, pero le aporta un enfoque diferente, una nueva forma de verlo. Emma y Dexter son amigos, y se empeñan en serlo aunque su relación va algo más allá de la amistad. Posee muchísimas reflexiones, de estas que te quedas dentro y vuelves a recordar al cabo de los días. Creo que todo el mundo puede sentirse identificado con esta película por la situación personal que viven los protagonistas. Tanto Emma como Dexter no tienen una vida fácil, y son dos situaciones que te llevan al extremo pero que a la vez son tan reales que conectan con el espectador de forma asombrosa.

A un buen guion como es el de One Day, se le añade una dirección brillante de la mano de Lone Scherfig e interpretaciones a la altura de la dirección con Anne Hathaway y Jim Sturgess. La sensibilidad que logra Lone captar en las miradas de los actores logra que entendamos todo sin palabras, e incluso veamos la forma en la que los actores dicen una cosa y en cambio están expresando la otra.

La originalidad, como he dicho, también es su punto fuerte. Ambos personajes toman el 15 de julio como un día clave, y aunque se encuentren a muchos kilómetros de distancia, ambos lo recuerdan y de alguna forma contactan con el otro, como si fuera algo tomado como costumbre. Así, el 15 de julio se convierte en un símbolo, algo que marca la película hasta el punto se ser contada únicamente en ese día durante años.

En conclusión, esta es una película que habría que ver. Que no os asuste su sencillez, o su pinta de película empalagosa, está 100% recomendada. Se trata de un trabajo de gran calidad, a destacar respecto al guion, la dirección y los actores. Si te gusta el mundillo del cine y el teatro, la recomiendo encarecidamente, pues tiene un aire a la trilogía de Antes del amanecer/atardecer/anochecer en cuanto al estilo.

Actores y Actrices