Emily se encuentra en Iowa viviendo con sus primos superconservadores.
Aria tiene la culpa de que su novio esté en la cárcel.
Spencer teme hallarse implicada en el asesinato de Ali.
Pero quien corre peor suerte es Hanna, que lucha por su vida en un hospital porque «sabía demasiado».
Como estas chicas no empiecen a hacerme caso, puede que incluso acaben envidiando la suerte de Hanna.—A.
Bueno como ya sabéis las reseñas de pequeñas mentirosas suelen parecerse mucho entre sí y es que la historia sigue siendo la misma: Cuatro chicas que hace unos años perdieron a una amiga misteriosamente. Esa amiga desaparecida era Alison, la abeja reina del grupo y por lo visto quien las unía porque una vez desaparecida cada una de las chicas tomó su camino. Ahora, unos años después, aparece alguien misterioso que parece saberlo todo de ellas, todos sus secretos, secretos que solamente conocía Alison y amenaza con contarlos. La persona misteriosa firma cada mensaje como A, pero no puede ser Alison porque aparece su cuerpo. Si Alison está muerta… ¿quién conoce los secretos de todas las chicas?
Tras “Venganza” hoy traemos la reseña de “Rumores” la cuarta parte de esta inmensa saga. Si, si inmensa, no paran de salir libros de pequeñas mentirosas y aunque son finitos, todos rondan las 250 páginas, siempre me he quejado de que la historia no avanza, de que siempre vamos dando vueltas al mismo tema, encontrándonos nuevas perspectivas de la misma situación y alguna que otra ligera pista, pista que nos lanza por un camino que nunca es el correcto. Pero en este libro ENCONTRAMOS RESPUESTAS, al menos descubrimos un dato muy importante y es que encontramos quien se encuentra detrás de A.
Jode estar a oscuras, ¿eh? ¡Pues imagina como se sentirán los ciegos! Si le cuentas a alguien lo que he hecho te dejaré a oscuras para siempre. ¡Muá! -A
Quizás este libro debería de haberme encantado, emocionado y ser mi favorito de la saga, pero… por primera vez el haber visto la serie de televisión ha jugado en mi contra, porque la situación se desarrolla de una forma muy similar y suele “chafarte” las sorpresas. Por otro lado, excepto el final donde pasa todo, el resto del libro se desarrolla de una forma bastante lenta. Ni siquiera sabemos de A hasta casi la página 100, vamos casi hasta la mitad del libro. Sin A la historia pierde mucha chispa.
La vida de las chicas cada día está más complicada, las relaciones con sus padres cada vez son más insufribles, sobre todo para la pobre Emily a quien echan de casa y envían a Iowa a vivir por ser lesbiana, la pobre sufre una inestabilidad emocional increíble y sus padres en vez de apoyarla la envían fuera.
Spencer no lo tiene más fácil, descubre cosas que la hacen pensar que ella tuvo muchísimo que ver en el asesinato de Alison y no sabe a quién acudir, puesto que su familia parece coleccionar secretos y mentiras porque los tienen de todos los colores.
Aria no puede vivir en casa, recordemos que Ella la echó cuando supo que le ocultó la infidelidad de su padre, pobre Aria, llega a vivir con su padre y su nueva novia quién le regala un curso de arte donde coincide con Jenna, ¿os acordáis de ella? La chica a la que dejaron ciega por una broma que intentaron gastarle a Toby, ese es el gran secreto que Alison obligó a las cuatro chicas a no revelar jamás, pero Aria descubrirá que no todo es lo que parece o lo que Ali quiso hacer que pareciera.
Y para rematar la pobre Hanna, la cual fue atropellada en el libro anterior por saber demasiado y ahora tiene una misión, conseguir recordarlo todo.
Una vez finalizado sientes que la historia ha terminado, pero en cambio sabes que tienes muchos libros por delante, intentan hacer un pequeño comentario para dejar la historia abierta, pero personalmente me dio la sensación de que todo había acabado, sé que algún día tendrá que terminar pero… me dará una lástima… Por más que me queje de las vueltas y vueltas que nos da Sara Shepard para contarnos algo, adoro a estas chicas.
La prosa de Sara Shepard sigue en su línea, lectura ágil y fácil con un montón de referencias a la moda, personajes famosos y de más, estas referencias no entorpecen para nada la lectura, ya que Shepard sabe muy bien lo que el lector quiere, aunque de mil vueltas para explicarlo.
Era una muñeca de felpa de la reina malvada de Blancanieves. Llevaba una larga túnica negra y una corona dorada en la cabeza, y el rostro muy pálido. Colgaba de una cuerda que llevaba al cuello, y alguien le había dibujado grandes cruces en los ojos. Había una nota clavada en la falda.
Espejito, espejito mágico ¿Quién es la más mala de todas? Te has chivado tú. Así que serás la siguiente. –A
En definitiva “Rumores” puede parecernos un poco lento, sobre todo en un principio pero es un libro que aclara puntos muy importantes de la historia hasta el punto que podemos creer que ha finalizado, aunque está claro que no… Sara Shepard seguro que nos tiene aguardadas muchas sorpresas más.
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Sara Shepard, nació el 8 de abril de 1977 en Filadelfia, Pensilvania de Estados Unidos. El padre de Sara, Bob, era americano y su madre Mindy, nació en Toronto. Durante su infancia Shepard creció junto a su hermana, Alison. En 1995, Sara se graduó en el instituto Downingtown West de la ciudad de Downingtown, Pensilvania. Se licenció por la Universidad de Nueva York, cursando más tarde un máster en Bellas Artes (MFA) en el Brooklyn College.
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