Diez, de Gretchen McNeil – Reseña

Opinión personal de la novela

Cuando Meg y Minnie reciben una invitación a la que podría considerarse la fiesta del año, no dudan en mentir a sus padres para poder acudir a la cita. Pero es que no podría ser de otra manera, la invitación viene de Jessica Lawrence, la chica más popular del instituto, las invitaciones son muy exclusivas y será en Henry Island, una isla muy poco poblada donde no tendrán a nadie que les pueda molestar.

El misterio comienza cuando ven un DVD que anuncia un mensaje de venganza, que nadie consigue entender, la desesperación se intensifica cuando una horrible tormenta los deja sin electricidad e incomunicados, pero el terror se desata cuando comienzan a aparecer cadáveres por todos lados, muertes que aparentemente son accidentales pero que iremos descubriendo que estas situaciones de accidentales no tienen nada.

[…] La idea de que habían eliminado intencionadamente una opción de comunicarse con el exterior aún tenía que calar en su cerebro, mientras iba comprendiendo la realidad de su situación, la mente de Meg se afanaba en dar con posibles soluciones […]

Desde bastante pequeñita he sido fan de las películas e historias de terror del tipo "Scream", donde el objetivo principal es descubrir al asesino antes de que este acabe contigo. Con Diez he conseguido sentirme dentro de la isla, vivir la angustia de los personajes e ir atando cabos una y otra vez intentando descifrar quien era el causante de estas muertes.

La historia está narrada en tercera persona, siempre desde el punto de vista de Meg, nuestra protagonista. La forma de escribir de Gretchen McNeil es muy sencilla y su lectura se hace súper rápida, además la abundancia de diálogos aligera todavía más su lectura y personalmente me encantaron, ya que en cada frase podíamos descubrir más el carácter de los personajes.

Con respecto a las descripciones creo que están en su justa medida, podemos imaginar con claridad el lugar donde estamos o incluso el asesinato que estamos viendo, creo que casi cualquier persona puede leer este tipo de escenas sin problema, te explica lo justo por lo que no consigue causarte mucho impacto con las escenas “sangrientas” pero entiendes perfectamente lo que ha ocurrido.

Meg tomó aire y abrió el diario.

¿Este cuaderno es tuyo? ¿No? ENTONCES DEJA DE LEERLO. AHORA.

Las palabras aparecían en el centro de la primera página, escritas con tinta roja. Debería haberlo tomado como una señal de mal agüero. Una señal que le hiciera no pasar la página.

Pero no fue así.

En serio. No es broma. Te encontraré y te haré daño.

La autora creó una protagonista buenísima. Meg es valiente, inteligente, decidida, humilde… es todo lo que podemos esperar de una protagonista, aunque en algunas ocasiones se deja “dominar” demasiado por miedo a hacer daño a su mejor amiga. Minnie, la mejor amiga de Meg, es un tanto inestable y necesita tomar medicación para poder controlar sus estados de ánimo, por lo que Meg en muchas ocasiones antepone la felicidad y estabilidad de su amiga a sus propios sentimientos. Por otro lado nos encontramos con T.J. el chico perfecto, y que no suene irónico porque es cierto, es guapísimo, comprensivo, atento, educado… ¿le falta algo a este chico? Del resto de personajes tenemos muy poquitos datos, pero sí los suficientes como para ver que son clave en la historia y que cada uno de ellos juega un papel muy importante en lo que está sucediendo en la isla.

La relación de amor que vemos en la historia es muy bonita, realmente preciosa pero en algunas ocasiones está fuera de lugar. Sinceramente en el estado de estrés y con la muerte pisándoles los talones no creo que lo que más te acelere el pulso sea que el chico que te gusta te coja de la mano. En este sentido creo que nos encontramos ante una historia de amor, muy bien tejida y explicada, porque realmente consigues ver a los protagonistas hechos el uno para el otro, pero que en algunas ocasiones y dadas las circunstancias en las que los personajes se ven envueltos, está un poco exagerada o incluso, como dije antes, fuera de lugar.

Algo que me encantó es la forma que tiene Gretchen de volvernos locos, llegué a dudar de todos los personajes, cuando por fin veía algo claro la historia y creía que sabía quién era el asesino, la historia daba un giro radical y volvía llevarme a la casilla de salida, era desquiciante.

El final es perfecto, de nuevo volví a quedarme a cuadros porque no esperaba para nada que esa persona fuera la que estaba detrás de todo, además la historia se cierra por completo dejando todos los cabos bien atados y explicándote cualquier situación anterior en la que pudieras tener dudas. Además cabe destacar que la forma en que la autora narra estas situaciones es perfecta, las situaciones más complicadas las redacta con una sencillez alucinante.

Debajo de la imagen, escrita en letras mayúsculas de reducido tamaño que no parecían cuadrar con el resto del diario, había una especie de cita:

PARA EL MOMENTO EN QUE SUS PIES RESBALEN.

En definitiva, Diez es una historia que te atrapa y te hará sentir escalofríos en más de una ocasión.

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