Gracias a Ediciones Kiwi por este ejemplar.
Hace veinte años, Deirdre y Adam tenían toda la vida por delante, y lo arriesgaron para estar juntos. Sin embargo, algo se torció en el momento justo y la magia se rompió, como la cuerda de una guitarra vieja.
Ahora, Adam quiere recuperar su vida, su carrera musical en decadencia y a la mujer a la que abandonó.
Deirdre quiere recuperarse a sí misma y olvidar un pasado que le impide avanzar.
Hay sueños que se rompen, pero hay cosas que se quedan en el alma para siempre.
El primer amor es como una vieja canción country: lenta, caliente e imborrable... Y siempre vuelve a tus labios cuando menos te lo esperas.
Hoy os traigo al Reseña de “El chico que caminaba como John Wayne”, un libro escrito por Arwen Grey, y publicado por la editorial Kiwi.
En este libro conoceremos la historia de Adam y Deirdre, dos personajes muy característicos con un pasado en común.
Era guapo, tenía talento, una voz capaz de hacerte llorar de emoción y caminaba como John Wayne, pero también era el tipo más gilipollas que he conocido en mi vida.
Adam es cantante, y vive de eso, pero hace mucho tiempo que su carrera musical se ha ido a pique, y que sus fondos bancarios están en números rojos.
Por ello, acepta grabar una especie de documental de su vida, en el que tiene que volver a su lugar de residencia, lugar en el que se encuentra su familia, su pasado, y su mujer, Deirdre.
No sabe cómo puede salirle, lo que tiene bastante claro es que necesita el dinero si quiere seguir comiendo y con su vida. Así que, no le queda más remedio que aceptar, y darles a las cámaras lo que tanto ansían.
Su familia está como loca por tenerlo de vuelta, aunque sus padres son un tanto peculiares, ya los conoceréis cuando leáis esta historia.
La que no está tan contenta por su regreso es Deirdre, su mujer, y sí, digo su mujer porque todavía no han firmado los papeles del divorcio, se fue dejándole tan solo una canción, una canción que se hizo famosa y que todo el mundo conoce.
Además, para más inri, Deirdre, en su trabajo, se ve obligada a preparar todo lo de la llegada de Adam, a elegir las fotos de las pancartas, y preparar su regreso y actuaciones.
Para nuestra protagonista, no es un plato de buen gusto, pero necesita su trabajo y la verdad es que nadie lo conoce tan bien como ella.
Cuando Adam regresa y ve a Deirdre, no puede contener sus sentimientos, y se da cuenta de que, cometió un gran error y quiere recuperarla sea de la forma que sea, pero nuestra protagonista no está decidida a volver a sufrir, le dio una oportunidad en su momento y Adam le rompió el corazón.
Pero… Hay muchas cosas que Deirdre no sabe, tantas, que, cuando las descubra, tendrá que replantearse muchas cosas, comenzando por ella misma.
Bueno, pues ahora que ya os he contado un poquito de qué va el libro, os contaré lo que a mí me ha parecido.
El libro es de tapa blanda sin solapas, y la edición es de bolsillo.
En la portada podemos ver unas botas country, que obviamente son de nuestro protagonista Adam. Unas botas muy características en esta historia.
Adam iba haciéndose a la idea de volver a McMinniville después de veinte años de haber escapado de allí con la cola entre las piernas, como si le persiguiera todo el ejército de la Unión.
El libro está narrado en tercera persona, y la verdad que creo que ha sido todo un acierto, debido a que, el libro gira en torno a dos momentos temporales, el pasado y el presente, lo que nos ayuda a entender de una manera más fácil y emotiva, la historia de amor que mantuvieron nuestros protagonistas, y los restos que quedan en el presente. Porque ya sabéis eso que se dice: “Donde hubo fuego, cenizas quedan”, y en este caso, no iban a ser Adam y Deirdre la excepción.
Los personajes de este libro están muy bien definidos, además, no hay muchos personajes de relleno y eso es algo muy positivo para esta historia, porque nos permite centrarnos en la historia principal. Así como tampoco hay mas historias secundarias que la trama de nuestros protagonistas.
Éste, es el primer libro que leo de la autora, y no me ha decepcionado en absoluto, se nota el gran ingenio que posee y la información que ha ido recabando acerca de sus personajes, y el entorno en el que los ha situado.
La lectura del libro es rápida y entretenida, además, tiene una continuidad lineal, no tiene bajón en ningún punto, y eso ayuda a que la lectura sea seguida y amena.
Si hablamos de la pluma de Arwen es muy delicada, aunque también muy optimista. Ha conseguido crear una historia muy emotiva, basada en dos momentos temporales, y unirlos a la perfección para culminar en un… ¿futuro juntos? O tal vez en la última vez.
Durante casi veinte años, había vivido, era muy consciente de ello, amargada por su pasado, lo que había hecho que fuera incapaz de salir de la trampa que ella misma se había preparado.
Como habéis podido leer, la trama es bastante entretenida, aunque esta historia está marcada por un pasado devastador y ciertas personas con un corazón horrible cuyo propósito es acabar con las cosas bonitas que crean felicidad.
Pero bueno, si tengo que elegir un momento temporal de este libro me quedaría con el presente, porque nos enseña que, cuando se quiere de verdad, se quiere para siempre, sea de una forma o de otra. Que los momentos bonitos no se olvidan, y que una persona puede vivir dentro de nosotros, en nuestro corazón, y en las cosas que nos recuerden a ellas, incluso en un viejo cuaderno.
La historia de Deirdre y Adam es tan bonita, y está tan marcada por las circunstancias, que no puede definirse de otra forma, que no sea con la palabra amor.
Vista previa | Producto | Valoración | Precio | |
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Arwen Grey es el seudónimo que utiliza esta autora nacida en Donostia para escribir romántica, aunque le gusta compaginar todo tipo de literatura. Después de que uno de sus relatos fuera escogido para la antología solidaria "20 pétalos" y tras el inesperado éxito de su primera novela autopublicada, "Olvidada en el pasado", decidió intentar tomarse en serio la escritura. DEsde entonces, varios de sus relatos, de géneros tan dispares cómo el terror, la histórica, la romántica o el género negro, han sido publicados en diversas antologías. Ha publicado varias novelas románticas, siempre con un toque característico de humor.
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